Suicidio en España: hablar también es prevenir

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El suicidio en España es un tema delicado, pero que requiere cada vez más visibilidad. Los índices de suicidio cada vez van en aumento y luego de la pandemia, la depresión, la ansiedad y el suicidio en España ha aumentado drásticamente.

Aunque el bienestar mental cada vez es más visible, se habla y se educa más, el suicidio sigue siendo un mito. Se ha considerado que hablar de él es como atraerlo cuando es totalmente lo contrario; hablar del suicidio también es prevención.

El 73% de los suicidios ocurren en países de ingresos bajos y medios.  Aquí hablaremos sobre qué es el suicidio, cómo reconocer las señales y la estadística del suicidio en España.

Quédate un momento.

Suicidio en España
Suicidio en España

Hablemos del suicidio

El suicidio es el acto por el que una persona se provoca la muerte de forma intencional, por lo general es la consecuencia de un sufrimiento psicológico y desesperación atribuible a circunstancias vitales como las carencias económicas, problemas en las relaciones interpersonales, enfermedades o patología psíquica.

La complejidad que presenta el objeto de estudio sobre los comportamientos suicidas es alta. Todavía no existe una definición aceptada y compartida con referencia al suicidio, aunque se hable con suicidio consumado o conducta suicida que no es lo mismo.

Como se ha mencionado, este comportamiento sigue siendo un tema tabú y este mismo estigma es lo que impide que las personas busquen ayuda a tiempo o compartan sus pensamientos y sentimientos.

A nivel social, el suicidio está mal visto o se le etiqueta como una persona débil y no hablar a nivel religioso, es catalogado como el peor de los actos.  El suicidio es la tercera causa de muerte entre las personas de 15 años a 29 años.

El suicidio en España es una de las principales causas de fallecimiento en el país, en el año 2018 afectó a 7 personas por cada 100.000. En el año 2020, el suicidio en España fue el año que más incremento tuvo en comparación al año 1906.

Este comportamiento no es un acto egoísta o para llamar la atención, se habla de un sufrimiento real y una de las primeras causas de muerte. El suicidio en España y en otros países se puede evitar, generando redes de apoyo, pero sobre todo hablando del suicidio

Los mitos y estigmas que pueden existir alrededor del suicidio son:

  • Quien lo dice no lo hace.
  • Es para llamar la atención.
  • Hablar del suicidio incita a él.
  • Es una debilidad moral.
  • El suicida está determinado a morir, y nadie lo detendrá.
  • Una vez que alguien tiene un comportamiento suicida, siempre lo será.

Son etiquetas y estigmas que realmente desacreditan el dolor del otro y el trabajo en cuanto al bienestar mental que se intenta lograr.

El suicidio no es culpa de nadie, se trata de un evento o comportamiento con múltiples factores. Afecta todo el contexto social.

Te puede interesar: Depresión con síntomas psicóticos: una guía para comprender y buscar ayuda.

Suicidio en España

El suicidio en España constituye un gran problema de salud pública. Como se ha mencionado anteriormente, el suicidio en España es una de las primeras causas de muerte, incluso más que los propios accidentes automovilísticos.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de suicidio en España fue de 7.6/100.000 habitantes en el año 2018. Cada día en España fallecen más de 10 personas por suicidio, lo cual es el doble por accidentes de tránsito.

En España se han planteado movimientos de prevención a nivel informativo y con los entes pertinentes, pero el tabú y el estigma aún siguen siendo un problema para poder sensibilizar sobre el suicidio en España.

En el año 2023, un total de 4116 personas se quitaron la vida en España, lo cual un tercio de estos suicidios en España corresponden a los hombres. Por grupo etario, el mayor número de suicidios fue entre los 30 años y 39 años de edad.

El suicidio es una causa de muerte muy importante y que realmente se deben tomar en cuenta los movimientos de prevención y darle mayor importancia al bienestar mental en este tema. En las estadísticas del 2023 se toma en consideración también el suicidio en adolescentes de 15 años.

Es importante destacar que, por ejemplo, el suicidio en España o en el mundo mejor dicho también tiene grupos vulnerables.

Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la guía de prevención del suicidio de Diaconía España identifican varios grupos vulnerables, los cuales son:

  1. Personas con problemas de salud mental: personas con cuadros severos que requieren de un apoyo prolongado y sociosanitario.
  2. Personas con discapacidad: se enfrentan a dificultades adicionales en cuanto a la accesibilidad en los entornos.
  3. Personas mayores: que viven en situación de soledad no deseada, agravando así los factores como la pérdida de seres queridos, enfermedades crónicas y tienen una percepción de falta de apoyo por su edad.
  4. Adolescentes y jóvenes: población con aumento de sufrimiento emocional, es importante tener espacios saludables y sin violencia.
  5. Comunidad LGTIBQ+: afectada por diversas formas de estigma, discriminación y exclusión social, lo cual afecta el bienestar mental. También existe la violencia sexual por su identidad sexual.
  6. Personas en riesgo de pobreza: incluyendo personas sin hogar, en situación de precariedad o vulnerabilidad social.
  7. Personas que sufren violencia: tanto física, emocional como psicológica, el trato negligente, el acoso y el abuso sexual.
  8. Personas privadas de libertad: a nivel mundial el suicidio sigue siendo un problema y una de las primeras causas de muerte. Un estudio de la OMS revela que el suicidio en España en las cárceles asciende a 90.9/100.000

El suicidio en España tiene un impacto social, y muchas personas pueden considerar o pensar “no lo conocía” o “es algo individual”. Y aunque la conducta suicida es una conducta “individual”, afecta directamente al entorno en el que se desenvuelve.

El impacto que tiene a nivel social es inminente y deja una huella con la que muchas veces cuesta lidiar.

En los adolescentes, por ejemplo, es el grupo más vulnerable, por así decirlo. Aquí es donde más se invalida, donde siempre se usan frases como “eres joven que te puede afectar”, “yo a tu edad no tenía tus privilegios” o “deberías ser agradecido y no tan dramático”.

El impacto que causan las palabras en el suicidio también deja una huella. Que tú nunca hayas tenido un pensamiento como este no implica que a otra persona no le pase, tampoco implica que el adolescente tenga la vida resuelta o no tenga problemas.

Sé amable con quienes te rodeas y lo que expresas. El suicidio es un problema social y no solo individual, hablarlo también forma parte de la prevención.

Si sientes que quieres hablar con alguien sobre tu malestar y no te sientes comprendido por nadie, puedes acudir a terapia psicológica. En terapia se te brinda un espacio totalmente confidencial, no obligatorio y donde te puedas expresar. También se te brindan estrategias para la prevención del suicidio. Contáctanos y agenda hoy mismo una sesión.

Factores de riesgos y factores de protección

Saber reconocer los factores de riesgo también se puede considerar algo vital e importante para poder ayudar a las personas.

La conducta suicida no tiene una causa determinada; cuando se realizan estudios sobre este comportamiento, se toma en cuenta que puede ser multifactorial.

Los factores de riesgo que se pueden tomar en consideración son los siguientes:

  • Trastornos mentales
    • Depresión.
    • Ansiedad.
    • Trastorno bipolar.
    • Esquizofrenia.
    • Trastornos de personalidad.
    • Trastornos de alimentación (TCA).
  • Eventos estresantes en la vida: pueden ser pérdidas importantes, de personas, mascotas, rupturas amorosas o pérdidas de viviendas. Problemas económicos, desempleo, acoso, discriminación, así como problemas en las relaciones interpersonales.
  • Antecedentes: conductas suicidas no consumadas, en ocasiones o en la mayoría de los casos existe una recaída cuando tienen un primer intento. Antecedentes familiares de suicidio.
  • Enfermedades crónicas.
  • Soledad y aislamiento social.

Como se ha mencionado, tener en cuenta estos factores, cuando existen síntomas de conducta suicida es importante. Te ayudará a pedir ayuda a tiempo o a brindarla.

También es importante destacar que, así existan algunos de estos factores en tu vida, no implica automáticamente que tengas una conducta suicida.

Para poder ayudar a otras personas, también puedes tomar en consideración estos puntos.

Factores de protección: que pueden ser establecidos tanto para ayudar a otros como para ayudarte.

  • Apoyo social y familiar: tener redes de apoyo sólidas es fundamental en conductas de riesgo suicida.
  • Acceso a servicios de salud mental.
  • Habilidades de afrontamiento: estrategias que ayuden a manejar y gestionar el estrés.
  • Conexión con un grupo de apoyo.
  • Medicación de ser necesaria.

Tomar en consideración los factores de protección tanto para ti como para otros es importante, te enseñará también a cuándo pedir ayuda y a qué sí se puede pedir la dicha ayuda.

Señales de alerta ante la conducta suicida

El estigma que se crea alrededor del suicidio es tal alto que no permite ver las señales de alerta o, en su defecto, las minimizan.

Es importante saber reconocerlas, estar alerta ante dichas señales y poder brindar ayuda cuando sea necesario. Pueden existir señales verbales, emocionales y de comportamiento.

Las señales de alarma son las siguientes:

  • Señales verbales: hablar siempre sobre querer morirse, tanto de manera directa como indirecta, decir que no le ven sentido a la vida o todo sería mejor si no estuvieran. Expresar muchas veces que lo harán.
  • Señales del comportamiento: se puede presentar de diversas formas.
    • Aislamiento social.Cambio extremo de estado de ánimo.Descuido personal.Regalar posesiones.Aumento del consumo en alguna adicción (cuando se presentan).Autolesiones.Aumento de la impulsividad.Hacer un plan.
    • Comer poco o dormir demasiado.
  • Señales emocionales: estas señales son más intrínsecas, pero que en ocasiones sí se pueden ver como el cambio de ánimo, labilidad emocional, irá constante, ansiedad percibida, desesperanza o anhedonia.

Y te puedes preguntar: ¿Qué hago si reconozco estas señales? ¿Cómo ayuda a alguien? Son dudas lícitas que pueden surgir; aquí algunas estrategias que puedes establecer o practicar.

  • Escucha activamente sin juzgar.
  • Preguntar sobre el suicidio, esto no incita al suicidio.
  • Mostrar empatía y apoyo.
  • No dejar a la persona sola si hay riesgo de conducta suicida.
  • Conectar con ayuda profesional: animar a buscar apoyo y acompañar si es posible.

También puedes informarte sobre los primeros auxilios psicológicos para estos casos. Toma en consideración las líneas de ayuda a las que puedes acudir en cuanto al suicidio en España, las cuales son:

  • 024 (línea de atención a la conducta suicida).
  • Fundación ANAR (niños y adolescentes).
  • Emergencias 112.

Prevención en el bienestar mental

Como se ha podido leer, el suicidio en España ha ido en aumento en los últimos años, así como también existen poblaciones de riesgo. Tomar acción sobre ello es importante, hablar sobre el suicidio forma parte de la prevención.

  • Autocuidado: tiene un alto nivel de importancia, aprender estrategias para gestionar el estrés y promover el bienestar emocional es fundamental.
  • Psicoeducación: la educación e información en estos temas es importante. Promover espacios seguros donde se puedan expresar y tener información sobre el suicidio, incluso desde casa, es de gran ayuda.
  • Grupos de apoyo: donde puedas sentirte acompañada en este proceso y darte cuenta de que muchas personas también han podido recuperarse de ello.

Conclusiones

El suicidio tiene un estigma muy gigante con él, a nivel social en todos los aspectos puede ser visto de mala manera, incluso buscar información sobre ello.

Aunque se hable de la depresión, la ansiedad o el estrés diario, no se toman en consideración las mayores consecuencias o malestares como el suicidio. Esto es solo la punta del iceberg ante un malestar social e individual.

Como se ha mencionado, el suicidio afecta a una comunidad entera, entiéndase formada por una o varias personas. El malestar emocional se transita solo, la persona se siente sola, pero qué desesperanzador es buscar ayuda y solo conseguir que le juzgan o que minimizan las emociones.

Tomemos acción sobre este malestar, escuchando también ayudamos.

Referencias

Salud, O. P. de la. (2014). Prevención del suicidio: un imperativo global.

Salud, O. P. de la. (2021). Vivir la vida. Guía de aplicación para la prevención del suicidio en los países.

World Health Organization. (2021, June 17). Suicidio. Who.int; World Health Organization: WHO.

Colaboradores de Wikipedia, (2016, April 14). Suicidio en España. Wikipedia.org; Wikimedia Foundation, Inc.

Wikipedia, la enciclopedia libre. (2016). Suicidio – Wikipedia.org.

Observatorio del Suicidio en España 2022 (datos definitivos diciembre 2023). (n.d.). Prevención Del Suicidio.

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No, no es un delito. El código penal no castiga a las personas que intentan suicidarse o lo logran.
En 2022 se produjeron 4.097 suicidios en España: 3 de cada 4 son de hombres y 1 de cada 4, de mujeres. Ello supone una media de más de 11 suicidios diarios.
Se trata de un problema que puede llegar a afectar a cualquier persona, si bien es cierto que afecta más a cierta población según sus recursos, no implica que nadie esté excepto de esta situación. Se trata de un grave problema de salud pública que debe ser abordado desde este ámbito.

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Barbara Pargas
Psicóloga con mención clínica, egresada de la universidad Bicentenaria de Aragua, Venezuela. Con estudios en neuropsicología, psicología organizacional. Acompañamiento psicológico. Manejo de terapia cognitivo - conductual, ACT, activación conductual, mindfulness. Asistiendo a niños, adolescentes y adultos. Manejo de crisis, procesos de duelo migratorio, trastornos psicoafectivos, trastornos del neurodesarrollo en adultos.
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